Si los hemos usado alguna vez, sabremos también que, aunque son muy eficaces, en ocasiones no son nada económicos; por ello hoy aprenderemos a fabricarnos el nuestro. Nuestras bolsas de gel caseras. El ingrediente clave para fabricar nuestro gel frío es el alcohol, ya que evita que el agua se congele por completo; lo cual hace que sea más sencillo envolverlas alrededor de la lesión.
Materiales:
2 tazas de agua.
1 taza de alcohol isopropílico (cuanto más alto sea el porcentaje de alcohol, más blandas serán tus bolsitas).
Colorante comestible azul (opcional).
2 bolsas con cierre hermético.
Preparación:
1. Mezcla el agua y el alcohol en una de tus bolsas.
2. Añade el colorante para darle el tono azul que tienen las bolsas de hielo comerciales.
3. Saca tanto aire como sea posible y cierra la bolsa.
4. Mete la primera bolsa dentro de la segunda para darle más resistencia.
5. Llévala al congelador por 12 horas antes de usarla la primera vez.
La preparación anterior, sería suficiente y efectiva cuando tengamos una pequeña lesión, obtendremos una consistencia ligeramente granizada que podremos moldear según la zona donde lo apliquemos; pero si queremos lograr un gel frío viscoso, como los comerciales cambiaremos el agua por detergente líquido.
La proporción que utilizaremos será 2/3 de la bolsa de detergente y 1/3 de alcohol. Deberemos tener en cuenta que el resultado final perfecto dependerá de la marca del detergente que utilicemos y de la proporción de sus componentes.
¿Cuándo deberemos utilizar nuestra bolsa de gel frío sobre una lesión?
El frío tiene un efecto analgésico que ayuda a aliviar el dolor de un traumatismo. Asimismo, disminuye el espasmo muscular y la hemorragia, lo cual acelera el proceso de recuperación de una lesión. También cierra los vasos sanguíneos, lo cual impide que llegue más sangre a la zona dañada. Esto reduce y ralentiza el proceso inflamatorio.
Debe aplicarse instantáneamente luego de producirse una contusión. En casos de tendinitis, se debe colocar una compresa fría cuando aparezca el dolor. Para esguinces, torceduras o fracturas, se lo debe usar durante las primeras 72 horas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario